¿Qué es la salud mental y cómo cuidarla?

12 nov. 2019 En: Más Bienestar Tiempo de lectura: 3 min
 
Conoce más sobre la salud mental

De acuerdo a la OMS, la salud mental se define como un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad.

En la actualidad, es un tema que preocupa mundialmente, ya que son diversos los problemas que hacen que una persona pueda sufrir este tipo de afectaciones, a tal punto que tener una mala salud mental puede desencadenar en trastornos que no le permiten a un individuo seguir el rumbo normal de su vida.

¿Enfermedades mentales o afectaciones de salud?

Generalmente, se puede hablar de enfermedades mentales o de afectaciones de salud mental, esta última refiriéndose a las condiciones inherentes del ser humano y que, en muchos casos, no se pueden evitar, como por ejemplo aquellas que generan conflicto, dolor y afectación en las emociones. Por ello, es importante poder identificar los signos de alerta generales para saber cuándo realmente se debe tomar la decisión de buscar ayuda.

Así mismo, se debe tener en cuenta que hay síntomas que cualquier persona puede presentar en algún momento de su vida, pues no siempre un individuo triste sufre de un trastorno mental o de un cuadro de afectación mental, ya que este tipo de respuestas emocionales hacen parte de la condición humana, pero sí se puede hablar de un trastorno cuando se presenta una continuidad en el tiempo o una intensidad en los síntomas.

 
Vista desde abajo hacia mujer de espaldas con ropa deportiva y manos alzadas, al fondo se ve el cielo de atardecer
Según Vanessa Bedoya Román, egresada de psicología y líder psicosocial de la UPB, dentro de los signos de alarma generales están la desmotivación frente a actividades que antes generaban motivación, disminución en actividades físicas cotidianas, no querer cumplir con los hábitos rutinarios, dormir más de lo que comúnmente se duerme, disminución del apetito, entre otras.

De igual forma, indica que otras situaciones cotidianas que pueden dar indicios de alguna afectación mental, pueden estar asociadas a las funciones cognitivas, por ejemplo falta de concentración en el trabajo, poca productividad en las tareas, las personas se tardan más de lo normal a la hora de cerrar compromisos. El aislamiento también es un síntoma importante. La persona puede encontrarse más sola y tiende a no querer compartir con los que tiene a su alrededor.

Las personas afectadas tienden a evitar salidas para compartir comidas, prefiriendo pasar la mayor parte del tiempo sola en su habitación o en casa. Además, es posible notar un aumento en la agresividad y respuestas exaltadas, que a menudo pueden ser malinterpretadas. Estos comportamientos pueden ser una manifestación de la afectación de la salud mental y una manera de canalizar el dolor emocional”, puntualizó Vanessa.

Ansiedad, estrés y depresión: desafíos comunes en salud mental

Algunas de las enfermedades asociadas con la salud mental son la depresión, la ansiedad y el estrés, siendo las mayores causantes de tragedias por no ser tratadas a tiempo.

  1. La depresión: según la Organización Mundial de la Salud, la depresión es una enfermedad frecuente que afecta a más de 322 millones de personas, es decir, un 4,4 % de la población mundial. Es una enfermedad que tiene síntomas asociados al estado de ánimo de las personas y es considerada como un trastorno mental caracterizado por la presencia de tristeza, pérdida de interés o de placer, sentimientos de culpa, dificultades en la autoestima, trastornos del sueño, cambios en el apetito, sensación de cansancio y problemas de concentración o de atención.

    La depresión se considera un trastorno serio, sobre todo, cuando es de larga duración, donde puede llevar al individuo que la padece a tomar decisiones que afecten su integridad.
     
  2. La ansiedad: según un informe de la OMS, en la actualidad hay 264 millones de personas que padecen trastornos de ansiedad. Esta patología se da más en mujeres que en hombres, y en Latinoamérica, Brasil es el país que más desórdenes de ansiedad padece con un 9,3 % de la población afectada, seguido por Paraguay, Chile, Uruguay y Argentina, dejando a Colombia en el séptimo lugar con un 5,8 % de la población que la padece.

    Una de las características de la ansiedad es la crisis de pánico; por ello, las personas empiezan a tener síntomas como taquicardia, sensación de que les falta la respiración o angustia al hecho de morirse o enloquecerse. De igual forma, hay un desborde de la activación del organismo tanto físico como mental, y el desconocimiento sobre lo que está ocurriendo hace que el individuo entre en crisis.
     
  3. El estrés: por otro lado, el estrés es un término que se aborda mucho en diferentes escenarios, pero que también está asociado a que el estado de alerta de las personas se desborde, dando paso a somatizar los síntomas y causar enfermedades como la migraña, diarrea, cambios en el peso, mala memoria, insomnio, entre otros.

    Generalmente, está presente en personas que desarrollan diferentes actividades y que experimentan una sobrecarga en sus quehaceres diarios. La ansiedad y el estrés están relacionadas con una respuesta del organismo a situaciones que sentimos, no se pueden controlar.

“Los seres humanos debemos tener estados de alerta, los cuales son esenciales para responder a nuestras actividades cotidianas. Lo que pasa con la ansiedad es que esos estados de alerta se desbordan y no hay un control efectivo sobre ellos, en muchos casos aparecen cuando existen elementos de orden subjetivo y emocional sin tramitar”, comenta Vanessa.

Conoce la Maestría en Psicología y Salud Mental UPB

¿Cómo prevenir las enfermedades relacionadas con la salud mental?

Es innegable que algunos contextos en los que estamos inmersos pueden afectar la salud mental, en este sentido las organizaciones también tienen el compromiso de fomentar entornos protectores y humanizados que promuevan el bienestar físico de las personas que habitan estos espacios.

Por esta razón se hace necesario un trabajo articulado con el sector salud, que permita garantizar las intervenciones y tratamientos pertinentes para aquellas personas que frente a un malestar emocional requieran de medicamentos y tratamientos psicoterapéuticos.

Hay que destacar que la persona es la principal responsable de tomar decisiones y aplicar estrategias de autocuidado físico y mental ante situaciones generadoras de malestar. Buscar las redes de apoyo adecuadas es esencial para fortalecer las estrategias de afrontamiento frente a los desafíos adversos.
 
Muchos brazos estirados de personas formando un círculo con la palma de la mano hacia arriba

Es fundamental fomentar hábitos generales que contribuyan a mantener una buena salud mental, tales como la práctica de actividad física regular, una alimentación equilibrada, el cuidado de los patrones de sueño y dedicar tiempo para la interacción social, tanto con otros como con uno mismo.

Asimismo, para prevenir problemas derivados del estrés, resulta crucial incorporar pausas activas, especialmente en jornadas prolongadas. Estos pequeños descansos entre las rutinas cotidianas facilitan la recuperación de energía y potencian el rendimiento en las actividades realizadas. Cuidar la salud mental es esencial para desarrollar plenamente las potencialidades de cada persona, por lo que es trascendental escuchar el cuerpo y la mente, pues nos puede dar indicios de que algo nos está generando malestar emocional.
 

Artículos que te pueden interesar

Logo Universidad Pontificia Bolivariana

Universidad sujeta a inspección y vigilancia por el Ministerio de Educación Nacional. Resolución 17228 del 24 de octubre de 2018 - 6 años.
Otorgado por el Ministerio de Educación Nacional. Nit UPB: 890.902.922-6. Todos los derechos reservados